Bavaria 36 HolidayRef. VP270
Un barco de crucero fino, cómodo, robusto y elegante. Lleno de accesorios para navegaciones de altura. Está en excelentes condiciones.
EUR 69.000 ,-
Generalidades
Descripción
Aparejo
Aparejo de Cubierta
Aparato Motor
Velas
Electrónica
Sistema Eléctrico
Disposición Interior
Comentarios de Barcos Singulares
Winfried Hermann era un fabricante de ventanas, apasionado de vela, cuando fundó el astillero Bavaria en 1978, junto con su amigo Josef Meltl, un bróker náutico. El objetivo que se propusieron fue de plantar cara a los mejores astilleros del mundo, los finlandeses de Nautor y Baltic, con unos barcos que fueran mucho más baratos, sin desmerecer en la calidad de construcción. Los primeros Bavaria se caracterizaban por los refuerzos de acero y de kevlar en el casco y se labraron una merecida fama de barcos robustos y muy marineros. Bavaria producía entonces dos gamas por cada modelo: la Holiday, con más camarotes y la Caribic con amplios camarotes de armador. La primera gama del Astillero estuvo diseñada por el alemán Axel Monthaup. El 35 Holiday pertenece a la segunda generación, diseñada por los hermanos Jakopin que colaborarían con el astillero durante casi veinte años. El 36 es un barco que sorprende por la calidad de los acabados, sea en cubierta que en el interior. También la habitabilidad es muy buena y aún más teniendo en cuenta que no va en detrimento de unas excelentes capacidades de estiba en todos los ambientes. Es un barco de crucero, pero muy ágil y capaz de desenvolverse muy bien en ventolinas. La unidad en oferta tuvo un primer propietario alemán que navegó desde el Norte hasta el Mediterráneo y luego usó el barco de forma ligera, como demuestran las pocas horas del motor. Su segundo propietario lo compró hace poco menos de un año, lo reaparejó de todo punto, con muchos accesorios importantes nuevos (junta de la cola, electrónica, llaves de paso, baterías, compresores de nevera y motor eléctrico del inodoro, cabullería, bimini y capota, luces de LED interior y exterior, etc., etc.), muchos otros revisados y renovados (motor, velas, etc.) para al fin tener que venderlo por haber recibido una oferta de trabajo irrechazable. Es una oportunidad más única que rara, de comprar un barco de gran calidad, dotado de todos las comodidades (con la excepción de un molinete del ancla), en condiciones casi equivalentes a nuevo, por un precio muy atractivo.