Raptus, tipo Colin ArcherRef. CP127

Un típico yate del norte de Europa, recio de construcción, buen velero, amplio interior para sus dimensiones. En buenas condiciones generales, con pocos trabajos por terminar.
EUR 15.000 ,-
Generalidades
Descripción
Aparejo
Aparejo de Cubierta
Aparato Motor
Velas
Electrónica
Sistema Eléctrico
Disposición Interior
Comentarios de Barcos Singulares
La historia del Astillero K. Christensen empieza en 1828 cuando Knut, el padre de Christen, compra un cobertizo en la aldea de Moen, en el fiordo de Risør, que se encuentra a unos 230 Km al sur de Christiania, hoy Oslo. Treinta años después de la compra, Knut construyó unas cinco lanchas de pesca, dando así comienzo a la actividad de construcción naval que iba a caracterizar el lugar en los cien años siguientes y que iba a ocupar a cuatro generaciones de su familia. Christen Knutsen (o sea, hijo de Knut) comenzó su propia actividad en 1875. Tres años antes, un todavía poco conocido arquitecto naval había presentado un nuevo concepto de barco para los prácticos de los puertos noruegos. Su nombre: Colin Archer. El tipo Colin Archer fue adoptado por los pescadores escandinavos y por los navegantes de altura que buscaban un barco robusto y seguro en condiciones extremas y que no necesitaban la velocidad entre sus variables. Christen Knutsen construyó pesqueros, barcos de exploración y algún yate, siguiendo casi siempre las líneas de los Colin Archer y a su muerte, en 1913, le sucedió su hijo Knut Christensen. En 1932, Knut construyó, entre otros, un robusto barco de pesca que por sus características se llamó Kvik, o sea rápido en danés. El Kvik perteneció a Oscar Larsen, un pescador noruego que lo usó toda su vida y entre él y su familia navegaron con el barco durante treinta años, vendiéndolo luego a otro pescador que lo siguió usando como instrumento de trabajo, pero le cambió el nombre en Raptus, jugando con el nombre del motor que llevaba, un Rapp de 17 caballos, monocilíndrico de dos tiempos, semidiésel. En 1971, cuando el Raptus estaba a punto de cumplir cuarenta años de actividad, otro cambio de propiedad marcó una nueva etapa de su vida, salvándole quizás de un final tan triste como probable. A partir de 1973 el barco pasó por diferentes fases de restauración, con la sustitución de casi todo el forro, de varias cuadernas y de la antigua cabina de gobierno, típica de un barco de pesca, con una cabina más baja y larga, que diera habitabilidad al interior. También le dotaron un nuevo aparejo de ketch, que en ese momento pareció como lo más manejable aunque pronto estuvo claro que no era así y que el Raptus necesitaba más potencia en sus velas, para llevar a paseo sus quince toneladas de desplazamiento. El barco fue entonces llevado a su astillero de origen, en 1980. Ahí le cambiaron el aparejo de dos palos por el actual de cúter cangreja, más potente y adecuado a las dimensiones del barco. La cubierta también se cambio por una de teca maciza de 4 centímetros de espesor, con los listones rectos, tan característicos de las construcciones antiguas, profesionales y recias. El famoso motor Rapp también fue desembarcado y sustituido por el actual British Leyland, que sigue funcionando perfectamente. Los tanques de agua y gasoil también fueron renovados. Después de navegar largo y tendido con otro propietario alemán, sea por el Báltico, que por los mares del sur de Europa, el Raptus quedó casi abandonado en las islas Canarias, en donde lo encontró su actual propietario, quien asumió la tarea de volver a restaurarlo, cambiando varias tracas del casco, la roda y el palo y la botavara, amén del sistema eléctrico y de la electrónica. También le puso velas nuevas, siguiendo las pautas tradicionales de los barcos de pesca noruegos de principio del siglo XX y manteniendo el número de vela del Kvik. Hoy está en buenas condiciones generales, aunque la salud de su propietario no le permite seguir cuidándolo como necesita. La fuerte estructura con sus enormes cuadernas de pino de Riga de 20 centímetros de espesor ha resistido muy bien el paso del tiempo. Las tracas del casco tienen 4 centímetros de grosor, así como la cubierta estructural de teca.
Hoy necesita un ciclo de pintura nueva en casco y amuras, barnices en cubierta y la sustitución de una cuaderna y dos tracas en la zona de popa, a babor: trabajos que se pueden llevar a cabo con cierta facilidad por estar en zonas muy accesibles.